sábado, 8 de noviembre de 2014

Reflexiones

Si hoy me preguntan que es la felicidad, podría dar muchas definiciones, dependiendo del estado de ánimo, de la coyuntura o tal vez de la decepción
  • La felicidad puede ser una luz vista a lo lejos del horizonte
  • La felicidad puede ser una ilusión del cual algunos se aferran para seguir viviendo
  • La felicidad puede ser la apuesta momentánea ante un plan
  • La felicidad puede ser el rocío en una fría mañana de invierno
  • La felicidad puede ser un retacito de momento que te puede desgraciar la vida
  • La felicidad puede ser compartir con tu amada la aparición de una estrella fugaz en una hermosa noche de domingo
  • La felicidad puede ser una nada en un momento esperado
  • La felicidad puede ser leer una hermosa frase escrita por un escritor sensible
  • La felicidad puede ser oír una hermosa melodía y transportarte a tu infancia
  • La felicidad puede ser recorrer tus pasados pasos y evocar tu niñez llena de candidez
  • La felicidad puede ser encontrar aquel parque perdido por años y lo descubres cuando tu corazón vibra de emoción
  • La felicidad puede ser que te visite un gato blanco en una noche estrellada
  • La felicidad puede ser que te acompañe una hermosa paloma gris en una tarde llena de sonrisas
  • La felicidad puede ser que alguien te ofrezca felicidad
  • La felicidad puede ser acompañar a tu hija a caminar y explorar mundos llenos de historias sacado de los libros leídos
  • La felicidad puede ser compartir vivencias sacado de las prosas leídas
  • La felicidad puede ser ensimismarse y encontrarse
  • La felicidad puede ser encontrarse y escuchar su propio silencio
  • La felicidad puede ser el regalo en la fertilidad del ser que amas
  • La felicidad puede ser un beso sincero
  • La felicidad puede ser la nada en un camino incierto
  • La felicidad puede ser un grito ahogado por años
  • La felicidad puede ser el silencio auto impuesto
  • La felicidad puede ser la sonrisa de tu hijo ante una travesura cándida
  • Pero la felicidad no es constante, es una lucha constante para robarle al tiempo esos momento de agradable regocijo que te puede dar el entorno.